La religión tiene dos raíces, dos
cimientos. Y los dos parten de una negación. El primero de estos cimientos es
el consuelo: la religión como consuelo o la negación de la comprensión de la
realidad, la ignorancia de la realidad o el no querer llegar a comprender la
realidad. El segundo de estos cimientos es la redención: la religión como redención o la negación de uno
mismo, la autoculpabilización, la asunción de una culpa inexistente o que no
pertenece al individuo
jueves, 30 de junio de 2016
miércoles, 29 de junio de 2016
Fama
La búsqueda de la fama, del
reconocimiento de la masa, que es en el fondo lo que significa la fama, es la
forma actual de reconocer, de afirmar el propio yo. Sin embargo, cuando se
busca la fama, cuando se busca el aplauso de la masa, lo que se hace es
integrar al yo en la masa, reconocerse a uno mismo como masa. Se busca el
aplauso de los iguales con lo cual esta búsqueda de la fama acaba siendo una
negación del yo, una entrega del propio yo a la masa, una renuncia al yo frente
a la masa.
martes, 28 de junio de 2016
Realidad e idividualidad
Cuanto más los sujetos renuncian a su
individualidad para sumergirse en la masa, en la que en el fondo se encuentran
cómodos, más, sin embargo, intentan reivindicarse como individuos exponiendo su
vida a través de las nuevas tecnologías. Y no solamente su vida física a través
de fotos narcisistas que a nadie interesan salvo al interesado, sino su vida
interior, su vida espiritual. Cuentan como son, lo que sienten o lo que hacen.
Es paradójica hasta cierto punto esta negación de la individualidad a nivel de
la realidad social efectiva por un lado y esta afirmación de la individualidad
a nivel de la realidad social virtual por otro. Paradójica hasta cierto punto
porque quizás esa afirmación virtual sea la única salida cuando la realidad
efectiva la niega.
lunes, 27 de junio de 2016
Arte y masa
Si todos los que se aglomeran a las
puertas de los museos, sobre todo cuando se ofrece alguna exposición
debidamente publicitada, fueran amantes del arte las cosas funcionarían de otra
forma. Lo cual me lleva a pensar que en realidad acuden en masa a los museos para
hacer ver que son cultos. Pero si hay que hacer ver que se es culto, lo mismo
que si hay que demostrar que se es demócrata, es porque no se es. La cultura,
como tantas otras cosas, también está de moda.
domingo, 26 de junio de 2016
Maldad y enfermedad mental
Tendemos a confundir la maldad moral con
la enfermedad mental. Así decimos que los tiranos -Hitler, Stalin-, estaban
locos. Y no estaban locos. El tacharles de locos, el convertirlos en locos es
eliminar su responsabilidad moral, eliminar su elección libre. Lo que hicieron
lo hicieron porque lo eligieron libremente, no porque una enfermedad mental los
obligara a hacerlo. Es fácil autocalificarse como loco y es fácil eludir la
responsabilidad. Pero los más peligrosos no son los locos.
sábado, 25 de junio de 2016
Yo y nosotros
Solo nos sentimos yo cuando dejamos de
ser yo y nos convertimos en nosotros. Quizás por eso siempre que decimos
nosotros, en realidad estamos diciendo yo.
viernes, 24 de junio de 2016
La muerte y el yo
Queremos formar parte de
la masa en vida y sin embargo nos negamos a hacerlo en la muerte. Negamos
nuestra propia individualidad en vida y sin embargo nos reivindicamos como
individuos en la muerte cuando en realidad debería de ser al contrario.
Deberíamos querer ser individuos particulares, independientes, autónomos, no
formar parte de la gente durante la vida y aceptar no solo que tenemos que
morir sino que nuestra muerte no significa nada para la para la supervivencia
de la especie. Que nuestra muerte no significa la muerte de la humanidad.
Quizás deberíamos de ser un poco mas egoístas en vida y un poco menos egoístas
en la muerte.
jueves, 23 de junio de 2016
Maneras de pensar
Una de las ventajas de estudiar
filosofía es que se conocen cuáles son las formas correctas y cuáles las formas
incorrectas de pensar. No lo que es correcto o incorrecto pensar –no hay
pensamiento incorrectos- sino cómo pensar correctamente y cómo pensar incorrectamente.
Las formas incorrectas de pensar son las que se suelen denominar falacias. Una
muy en alza actualmente es la llamada falacia naturalista, tan antigua, tan
clásica. El pensar que todo lo que hay en la naturaleza es bueno por el mero
hecho de ser natural y por consiguiente todo lo que no es natural en sí mismo
es malo. Esta forma de pensar, en tanto que falacia, es una forma incorrecta de
pensar. Quizás aquellos que hoy defienden de manera tan cerrada lo natural
frente a lo no natural deberían pararse a pensar si eso que piensan es una
forma correcta de pensar.
miércoles, 22 de junio de 2016
El mito de la asertividad
Un nuevo mito: el mito de la
asertividad. Además un mito cristiano: la asertividad no deja de ser el poner
la otra mejilla. Nadie es asertivo, es más, nadie puede ser asertivo. Y mucho
menos se puede se asertivo cuando hay que enfrentarse a la agresividad
constante de la sociedad –de los individuos que componen la sociedad, pues la
sociedad no es más que eso-. La asertividad no es más que el camino más fácil
hacia la propia destrucción.
martes, 21 de junio de 2016
Totalitarismo y esencia humana
Quizás la esencia del totalitarismo esté
impresa ya en la esencia misma de los ciudadanos y por ello sus tendencias políticas
acaben siempre desembocando en posturas totalitarias. De hecho ese afán por
reconocerse en la masa, ese afán por diluirse, por disolverse en un grupo –en
cualquier grupo, en realidad-, ese afán de reconocimiento por parte del grupo
en el fondo no es más que, como decía Fromm, miedo a la libertad. En el fondo
no es más que un deseo de no ser uno mismo. En el fondo no es más que una
necesidad de negar la propia libertad y por lo tanto de constituirse en la masa
con la que se moldea el totalitarismo.
lunes, 20 de junio de 2016
Peligros sociales
Tradicionalmente se ha considerado que
los individuos libres se unen en sociedades para evitar los peligros, los
perjuicios o las incomodidades que supone el vivir aislados, fuera de la
sociedad. De esta manera el individuo se obliga de alguna forma con la sociedad.
Esta concepción que surge del individualismo paradójicamente va a ser la que se
utilice contra el individualismo: el individuo vive en sociedad y debe de vivir
en sociedad porque es la sociedad la que le protege. Lo que habría que tener
hoy en cuenta es que esos peligros, esos perjuicios, esas hostilidades que
antaño acechaban al individuo fuera de la sociedad hoy en día lo hacen desde
dentro.
domingo, 19 de junio de 2016
La izquierda y la traición
Un traidor es el que traiciona a los
suyos. Un traidor también es el que se traiciona a sí mismo. La izquierda
española tiene ya una larga tradición de traicionar a los suyos: no nos vamos a
sorprender ahora por una traición más. Esperemos, sin embargo, que sean lo
suficientemente sensatos como para no traicionarse a sí mismos.
sábado, 18 de junio de 2016
Humanidad y Dios
Dios no es más –ni menos- que un sentimiento
que surge de la negación por parte del individuo de su propia humanidad. Por
eso los que, como decía Nietzsche, somos humanos, demasiado humanos, los que no
renunciamos a nuestra humanidad esencial no tenemos ese sentimiento, no lo
necesitamos. Los que sabemos qué somos, no creemos Dios.
viernes, 17 de junio de 2016
Necedades
Dicen que cuando un dedo señala la luna
el necio mira el dedo. Y los demás necios le consideran inteligente, añadiría
yo. Más o menos lo que ocurre aquí: cada vez que un necio abre la boca,
obviamente para decir necedades, todos los demás necios, más necios que él,
hacen eco de sus palabras y las consideran el culmen de la sabiduría, la
esencia de la noticia política. En realidad ya no es posible discernir si lo
que se dice se hace con el objetivo de calcular la cantidad de estupideces que
pueden convertirse en noticia y que la población puede digerir o simplemente es
que no se tiene nada mejor, más inteligente, que decir.
jueves, 16 de junio de 2016
Víctimas y verdugos
Se culpabiliza a la víctima y se victimiza
al verdugo. Se transforma al culpable en inocente arrebatándole a éste no solo
su vida, sino también su papel: su inocencia. La víctima es culpable por ser
occidental, por ser francés, por ser homosexual, por ser judío. Es culpable por
no denunciar al imperialismo y al capitalismo. Es culpable por no indignarse
ante la desigualdad y la injusticia. Es culpable por llevar minifalda. Y la
única condena moral posible al único acto auténticamente inmoral se encuentra
siempre con la objeción de aquéllos que se sitúan en la cómoda superioridad que
dan las consignas trasnochadas. Hasta que ellos también sean culpables. Hasta
que se conviertan en víctimas.
miércoles, 15 de junio de 2016
Subasta política
Propongo que se sustituyan las campañas
electorales y las propias elecciones por una gran subasta pública donde los
ciudadanos vendan su voto a aquel candidato que en más alto grado colme sus
deseos. Quizás no sería tan democrático como lo que hay ahora –o quizás sí,
quién sabe, o quizás sea lo mismo- pero desde luego sería más honesto.
martes, 14 de junio de 2016
Historia y política
Además de los anuncios sentimentales en
TV y los debates monologados, en las campañas electorales serían convenientes,
si no obligatorias, las lecciones de historia, al menos desde el siglo XVII en
adelante, la época moderna, nuestra época –aunque algunos no se lo crean-. Así,
entre otras muchas cosas, se podrían desvanecer todas las apariencias y se desvelarían
muchos velos: se vería que lo que parece nuevo es más bien antiguo; se vería
que lo que parece una cosa es en realidad su contraria o se vería que lo que se
puede hacer ya se hizo y lo que se puede ya fue y se extinguió porque la
realidad de lo posible resulta probemática cuando se hace real. Nos
ahorraríamos así tiempo y dinero, amén de disgustos.
lunes, 13 de junio de 2016
Voto útil
En circunstancias como las actuales
siempre me pregunto qué es el voto útil o, más bien, para quién resulta útil el
voto útil. Se podría pensar que el voto útil es aquél que es útil para toda la
comunidad pero nadie vota pensando en el interés común, como nadie ama al
prójimo como a sí mismo. Así que el voto útil sería aquel que es útil para los
intereses particulares del que vota, aunque siempre se tienda a creer que el
interés particular necesariamente ha de coincidir con el interés general. En
cualquiera de los casos el voto útil
seria voto útil para el votante ya sea éste colectivo o individual. Pero mucho
me temo que, en última instancia, para quien el realidad es útil el voto útil
es para el votado.
domingo, 12 de junio de 2016
Platón
Algunos políticos deberían de leer a
Platón. O releerlo: vamos a suponerles un cierto grado de cultura. Así
recordarían que aferrarse a la copia y olvidar la Idea original sólo conduce a
la caverna. Y recordarían también que se debe expulsar a los poetas de la
ciudad, precisamente porque hacen una copia de la copia y se alejan, así,
doblemente de la verdad.
sábado, 11 de junio de 2016
Lo que se quiere escuchar
Se suele decir que en una campaña
electoral los políticos mienten. Yo no creo que sea así: mentirnos sería
suponernos inteligentes. En una campaña electoral los políticos dicen lo que
sus votantes potenciales quieren escuchar. Así que cuando dicen obviedades,
sandeces y necedades es porque que piensan que es lo que la gente quiere
escuchar. Y no parece que se equivoquen mucho, cuando lo siguen haciendo
campaña tras campaña. Digo yo que si alguna vez les hubiera ido mal no lo
habrían vuelto a hacer. Así que si lo repiten es porque les sale bien. Ergo lo
que la gente quiere escuchar son obviedades, sandeces y necedades, lo cual
explica a su vez por qué no nos mienten. Porque verdaderamente no somos
inteligentes.
viernes, 10 de junio de 2016
Idiotas
Según las últimas encuestas los dos políticos
peor valorados son los líderes de los dos partidos que van a sacar mejores resultados en las próximas
elecciones. De este hecho deduzco que se pueden extraer tres consecuencias: o
bien que en este país somos masoquistas, o bien que somos esquizofrénicos, o
bien que somos idiotas. Puesto que no existen estudios científicos que avalen
ninguna de las dos primeras opciones, mis propias vivencias empíricas y mi
experiencia diaria, si bien no contrastadas científicamente, me llevan a pensar
que a conclusión correcta sería la tercera.
jueves, 9 de junio de 2016
Infantilismo politico
Lo de los corazoncitos y el programa político
simulando un catálogo de una tienda de muebles no merece mayor comentario: los
que se identifican con ellos lo dicen todo. Otra cosa es el infantilismo
político que destilan, producto de un pensamiento infantil. Es curioso ver como
gente inteligente, aquellos que utilizan un pensamiento desarrollado y complejo
se sienten abrumados ante el pensamiento infantil del “pío, pío que yo no he
sido”. Y lo consideran el culmen de la finura estratégica y de la inteligencia
política. Y todo porque se les escapa, no logran asirlo, porque el pensamiento
complejo no es capaz de asir el pensamiento infantil. Es como si nos
enfrentamos a los argumentos de un niño de cuatro años. La izquierda folclórica ha devenido en izquierda de jardín de infancia.
miércoles, 8 de junio de 2016
Dejar vivir, dejar pensar
Cada cual es libre de vivir su vida como
quiera, de hacer con ella lo que le venga en gana. Y esto significa tres cosas:
que no hay que decirle a nadie lo que debe hacer con su vida, no hay que dar
consejos, sobre todo si nadie los pide; que no hay que considerarse superior
moralmente a nadie por vivir de un u otra manera y que no hay que quejarse de
la vida que uno vive. Justo las tres cosas que no hacemos. Les decimos a los
demás lo que deben hacer, nos metemos en asuntos que no nos conciernen porque
la vida de cada cual es asunto exclusivamente suyo; nos consideramos moralmente
superiores a los demás porque no fumamos, no bebemos, no comemos carne,
reciclamos nuestros desperdicios, somos muy solidarios o votamos a la última tendencia
política. Y, sobre todo, nos quejamos de las decisiones libres que tomamos en
nuestra vida para no asumir sus consecuencias.
martes, 7 de junio de 2016
Dignidad y miseria
Los suizos han rechazado en referéndum
una renta mínima de cerca de dos mil trescientos euros. Los españoles estamos
dispuestos a entregar nuestro voto y nuestro honor si hace falta a cualquier
partido que prometa una renta básica de un par de cientos de euros. Los suizos
son muy raros, muy estirados y muy calvinistas. Y además reaccionarios e
insolidarios. Los españoles somos muy católicos y muy hidalgos. Y muy solidarios,
sobre todo con nosotros mismos. Eso si, la dignidad nos la dejamos en aquellas
famosas marchas por la Dignidad y, aunque poco dignos, somos muy lógicos. Así que
si los suizos, que son todos ricos y de derechas, rechazan la renta básica, en España
es la izquierda quien la propone. Una izquierda, eso si, con un cierto tufillo
rancio a incienso y misal.
lunes, 6 de junio de 2016
Felicidad y cursilería
“La sonrisa de un país” es una
cursilada. Y además no es un lema político, es una declaración filosófica. Ya
no se trata de libertad, ni siquiera de justicia: se trata de la felicidad. Han
descubierto que la felicidad es objetiva y no depende de los sujetos
individuales –algo, que, por otra parte, ya había descubierto la religión hace
mucho- y han encontrado la manera de hacer feliz a todo el mundo, el elemento
científico, observable, que lleva a la felicidad –otro Dios-. Ellos nos
marcarán el camino porque saben lo que es bueno para nosotros. Así que a partir de ahora todo el mundo a ser
feliz por decreto. Y pobre de aquél que, con Kant, pregunte: “¿qué ocurre si no
quiero ser feliz?”
domingo, 5 de junio de 2016
Los hijos y las modas
Los famosetes marcan tendencias y dictan
modas. Así que, por ejemplo, se ha puesto de moda agredir a periodistas al
grito de “apaga esa cámara o te mato”. Y también se ha puesto de moda tener
hijos. Se tienen hijos como se va a la última exposición o se compran unos
zapatos: para figurar, para darse tono, para enseñarlos. La gran diferencia
entre un hijo y un par de zapatos es que a los zapatos no hace falta educarlos
–a no ser que aprieten- y a un hijo si. Los famosetes nos enseñan a sus hijos
vestidos a la última pero no nos muestran cómo los educan. Y de ahí que educar
a los hijos no esté de moda.
sábado, 4 de junio de 2016
El espectáculo
No estoy de acuerdo con que exista una
polarización en la sociedad, como tampoco estoy de acuerdo con que la sociedad
sea más consciente políticamente. Son solo apariencias consecuencia de la
conversión de la política en espectáculo de masas. Así, lo que parece
polarización no es más que rivalidad deportiva, se sigue a los partidos como
los hinchas siguen a su equipo de fútbol y los debates políticos se anuncian
como un encuentro de la máxima rivalidad. Y lo que parece conciencia no es más
que contemplación masiva del gran show televisivo en que ha devenido la
política, no son más que datos de audiencia y se contempla la política como se
puede contemplar un programa de cocina o un reality.
Simplemente la política se ha puesto de moda, como tantas otras cosas (tener
hijos, por ejemplo). Hoy, lo que le pasa a la política es que es trendig topic.
viernes, 3 de junio de 2016
Los candidatos
El candidato socialdemócrata pidió que
no se impidiera gobernar a aquél que lograra reunir más escaños y al mismo tiempo
aseguró que no permitiría un gobierno del primer partido de la derecha.
El candidato populista se alió con los
comunistas pero no le gustaban las banderas comunistas en sus actos de campaña.
El segundo candidato de la derecha pidió
la dimisión del primer candidato de la derecha, pero no estaba enfadado con él.
El primer candidato de la derecha seguía
desaparecido, viviendo en su propio mundo interior.
El circo continuaba con
su exitosa gira. El público pagaba gustoso su entrada.
jueves, 2 de junio de 2016
Conocer la libertad
La libertad consiste en que cada uno pueda enarbolar la
bandera que le de la santa gana. Como si quiere ondear unos calzoncillos
colgados de un palo. En lo que no consiste la libertad es en quemar la bandera
de el de al lado si no nos gusta, o en obligarle a cargar con la nuestra. Cada uno
puede pensar, hacer o decir lo que le apetezca y no puede obligar a los demás a
pensar, hacer o decir lo que él quiere que piensen, hagan o digan. Por muy
correcto, verdadero o acertado que le parezca. Incluso es libre de pensar que
lo que otro piensa, dice o hace le perjudica. De lo que no es libre es de
obligarle a dejar de hacerlo. Porque o somos libres o no somos nada. Fácil. Pero
aquí no tenemos ni puñetera idea de lo que es la libertad, aunque no se nos
caiga de la boca.
Lo sistémico
Cada vez que escucho la frase “la corrupción es sistémica”
confío ciegamente en que la persona que la enuncia desconozca el significado
del termino “sistémico” y lo emplee tan solo porque está de moda. Porque de no
ser así sería muy serio. Y muy grave. Sistémico es aquello que forma parte del
sistema, aquello que estaría imbricado de tal forma en el sistema que éste
depende de ello, de tal manera que si lo sistémico desaparece el propio sistema
desaparece. Así que alguien podría pensar que la manera más fácil de acabar con
la corrupción es acabar con el sistema, aunque lo que estuviera corrupto fuera
su pensamiento. Y es que la corrupción es sistémica en los sistemas totalitarios,
en el franquismo o en Venezuela, donde la propia corrupción crea un entramado
de redes clientelares que son sobre as que se sustenta el mismo sistema. Así
que en una dictadura sí, para acabar con la corrupción hay que acabar con el
sistema
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