jueves, 2 de enero de 2025

Franco tiene el culo rosa

 Cuando yo era pequeño cantábamos, con la melodía del himno nacional, una letrilla que decía “Franco, Franco tiene el culo blanco, porque su mujer se lo lava con Ariel”. En vista de las últimas actuaciones de nuestro ínclito -pues ya se ha convertido en ínclito- presidente del Gobierno habría que pensar que el culo de Franco era más bien rosa -seamos serios, el PSOE rojo, rojo, nunca ha sido, más bien rosadillo, ahora rosa trincón- o, a lo mejor, es el culo de señor presidente el que se ha vuelto blanco, para ser como Franco. Solo así se puede entender el afán que tiene el ínclito anteriormente citado por resucitar por todos los medios al dictador del blanco trasero. Los que hemos tenido una educación un poco normal, y no pertenecemos a esas nuevas generaciones tan bien preparadas que apenas saben leer, sabemos que Franco está muerto, enterrado y vuelto a enterrar, y que andar sacándolo en procesión, literalmente la primera vez, figuradamente esta segunda, debe tener detrás algún tipo de interés, que no sea el de hacer llover, no vaya a ser que el señor presidente se manche los zapatos de barro.

Ni siquiera a la señora Meloni, esa ultrafascista que ha ganado una elecciones en Italia, ese país que no es ni por asomo una democracia liberal, se le ha pasado por la cabeza dedicar un año entero, ni siquiera cinco minutos a celebrar la muerte de Mussolini. Es más, ni siquiera a los millones de fascistas de camisa azul y boina roja que según el del culo rosicler pueblan el suelo patrio se les había ocurrido hasta ahora dedicar un año entero a la muerte de Franco. En todo caso el 20N a unos pocos abuelos, que, como se encarga de recordarnos el gobierno en pleno cada vez que tiene ocasión, son tan solo la punta de lanza, la vanguardia de los ejércitos franquistas ocultos entre las sombras.

En fin, que aquí está el señor Presidente del Gobierno que quiere ser Jefe de Estado, dedicando todo un año a celebrar la muerte de Franco, por no sé que asunto de memoria histórica, o democrática, o algo así -la memoria siempre es histórica, aunque más que democrática tiende a ser selectica. No es de extrañar que en Vox estén tan contentos con el presidente del Gobierno que le echen siempre un cable en las situaciones más difíciles, que habría que pensar que les debe más a ellos el gobierno que a sus socios. Visto lo visto, no resulta raro que aquellos que le quieren mal acusen al señor presidente de sacar a pasear el espantajo de Franco cada vez que las cosas le vienen mal dadas, a él o a alguien de su familia o de sus amigos o de su entorno más cercano. Yo creo que no hay que ser tan mal pensado, ni creer que nuestro presidente acude a Franco para seguir manteniendo el crédito electoral entre una población de lumbreras que piensan que ETA ha desaparecido pero que Franco aun continúa vivo y coleando -o culeando-. En realidad, la fijación del señor Sánchez Pérez-Castejón por Franco yo creo que va más allá. Tiene una profundo sesgo freudiano y tiene que ver con la admiración oculta hacia el padre, en este caso padre putativo e intelectual. En realidad, el gran afán del Presidente es ser, como ya hemos dicho y como demuestra día a día, Rey. De ahí que el actual rey le estorbe un poquito. Y como admirador secreto de Franco el señor presidente del gobierno nos es franco, y, como dicen que dijo en una ocasión Gila, no se va.