jueves, 24 de junio de 2010

Menos curas, más cultura

 No se puede respetar a quien ni siquiera respeta a los muertos. El Vaticano condena a José Saramago después de su muerte. Durante su vida, Saramago hizo más por la cultura que 2000 años de cristianismo y una sola de sus líneas es más humanizadora que todos los libros de la Biblia y el Canon Eclesiástico juntos. No, no se puede respetar a quien ni siquiera respeta a los muertos.
 Nadie ha explicado nunca jamás por qué las creencias religiosas tienen que resultar más respetables que las ideologías políticas o los gustos deportivos. ¿Por qué ha de ser más respetable creer en una entidad invisible, trascendente, que no se puede oír, ni ver, ni tocar, que no se sabe dónde está, ni lo que hace, ni si tiene cuerpo y que es contradictoria consigo misma –porque no se puede ser uno y tres a la vez- que en un culo gigante que nos expulsó a todos a este mundo y al cual volveremos una vez cumplido nuestro ciclo vital?. Sin embargo, lo segundo es una estupidez, y lo primero la base de una religión sobre la cual se han edificado grandes negocios y se han desatado guerras. No son respetables las ideas, no, sino las personas, y sin embargo cada vez estoy más convencido que el hecho de tener ciertas ideas hace que una determinada persona pierda su derecho a ser respetada.
 ¿Qué es el cristianismo?. Un conjunto de supersticiones y leyendas babilonias, mesopotámicas y egipcias, a las que Pablo de Tarso aglutina bajo la figura del hijo de un carpintero (o un albañil) que supuestamente vivió en Galilea hace más de dos mil años, del cual no se tiene ninguna noticia cierta sobre su existencia y al que el susodicho Pablo diviniza y convierte en Jesucristo. Funda así una religión, el cristianismo, cuyo único objetivo es alcanzar cada vez más cotas de poder a fuerza de engañar a los ignorantes y los supersticiosos, que quedan convertidos en los paganos (porque pagan) de la novedosa creencia.
 O quizás haya que respetar a los jefes de la secta. Como Pío XII que apoyó sin fisuras el régimen de Hitler en Alemania, o Pablo VI que bendijo la dictaduras asesinas de Franco y Salazar. O quizás Wojtila, el máximo responsable del aumento del SIDA y la miseria en África, por no hablar de sus devaneos políticos que acabaron con el equilibrio en el que se fundamentada la política mundial y nos han conducido a la situación de capitalismo salvaje y desvergonzado que vivimos actualmente. O quizás haya que respetar a Ratzinger, miembro de las juventudes hitlerianas, soldado en el Ejército alemán durante la Segunda Guerra Mundial y máximo dirigente de la Santa Inquisición hasta que el Espíritu Santo (o el dinero de la Logia P2) iluminó a los cardenales que le nombraron Papa, ese Ratzinger que cuando visitó Auschwitz no sabía dónde estaba Dios, a lo mejor porque ese Dios, su dios, siempre se ha aliado con los poderosos.
 A lo mejor la Iglesia Católica, antes de condenar a nadie o de dar lecciones de moral debería mirarse sus propias vergüenzas. Los curas pederastas que pueblas sus prietas filas y que son protegidos de forma sistemática por la Jerarquía Eclesiástica. O debería revisar sus negocios millonarios con la Mafia, negocios que ya le costaron la vida a un Papa. Uno pensaba que el anticlericalismo era una postura del siglo XIX que en el XXI ya no tenía sentido, pero a la vista de todos estos hechos –que no son más que una pequeñísima punta de un iceberg mucho mayor- se da cuenta de que es la única postura, ya no política, sino ética, posible. Tendremos que volver a gritar como antaño “menos curas, más cultura”

4 comentarios:

evitadinamitainsaneinthebrain dijo...

Impresionante en serio; también el cristianismo viene dado porque es una religión de masas y es lo "común" o lo "normal" en todos y poca gente se sale de ese patrón y generalmente quien sale de ese patrón es aquella persona con un poquito más de sentido común yo creo. Nadie se va a parar a pensar en si de verdad es cierto lo que dice dicha religión, se limitan a aceptarla y a creérselo sin más. No sé, el resto seremos unos marginados sociales, eso sí, no viviremos engañados. Un saludo y feliz verano.

Emilio Garoz dijo...

Para muestra un botón. Apenas unos días después de condenar a Saramago al fuego eterno, Benedicto califica de destestable el registro que la Policía belga ha efectuado en la sede del Obispado de Bruselas buscando pruebas de pederastia. Sin comentarios.

Fab dijo...

Verdad tras verdad, y sólo verdades. Rouco no estaría orgulloso de ti, y eso te hace muy grande. Espero que no te canses de hacer entradas, y que sigan igual que siempre.

Fab dijo...

Verdad, verdad. Y sólo verdades. Rouco Varela no estaría orgulloso de ti, y eso te hace grande. Espero que no dejes de escribir, y que sigas teniendo entradas tan geniales como esta.