Hay dos tipos de personas: los que creen
en sí mismos y los que creen en dios, los que creen en la humanidad y los que
creen en un ideal, lo que no deja de ser otra cosa que una forma distinta de dios.
Creer en un ideal es una renuncia a uno mismo, es una entrega a otra entidad,
es decir, es una construcción personal de un dios. Y toda construcción personal
de un dios supone una negación de uno mismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario