miércoles, 20 de octubre de 2010

La erótica del poder

 Hace ya tiempo que Maquiavelo nos instruyó acerca de las tácticas necesarias para conseguir el poder y mantenerse en él y eso es algo que jamás se le reconocerá lo bastante: que mostrara a la gente de su época y a las generaciones venideras cuáles son los instrumentos que utilizan los gobernantes para conservar su posición privilegiada. También Hume dijo que la ética que utilizan los políticos es distinta a la del resto de los mortales, en vista del lugar que ocupan en la sociedad. Desde siempre se ha sabido que el poder tiene algo especial que hace que los que lo poseen hagan cualquier cosa por conservarlo, y quienes no lo poseen no paren en mientes para obtenerlo. Sin las sutilezas de Maquiavelo ni el “common sense” de Hume, hoy nuestros dos grandes partidos nos están dando una lección práctica de eso que se llama “erótica del poder”.
 Por un lado, el Presidente del Gobierno, el señor Rodríguez Zapatero, no tiene ningún reparo en desmontar lo poco que queda del Estado para conseguir que el Parlamento apruebe sus Presupuestos para el año que viene. O más bien los Presupuestos de la UE y los EEUU, que es lo mismo que decir los Presupuestos de las grandes corporaciones y los mercados financieros. Si para ello es necesario romper la Caja Única de la Seguridad Social, que entre otras cosas es el instrumento que mantiene la cohesión del Estado del Bienestar (o de lo que queda de él) y asegura el pago de las pensiones, cediendo parte de su control al Gobierno vasco, pues se hace, si lo que se consigue es que el PNV vote a favor de esos Presupuestos en el Congreso. Pero cuidado, eso no significa ni que esos Presupuestos sean adecuados –porque ya ha quedado demostrado que todo ha sido una componenda del PSOE y del PNV para justificar lo injustificable y sacar adelante unas cuentas regresivas y antisociales- ni que el señor Rodríguez Zapatero sea un hábil político –porque cualquiera puede conseguir lo que quiera a base de sobornos, y el que ha pagado nuestro señor Presidente ha sido muy elevado: cuanto más torpe es uno más tiene que pagar-, ni un ejercicio de responsabilidad por parte de nadie –porque por parte del PSOE agotar una legislatura que ya está perdida lo único que significa es empecinamiento por mantener el poder, cuando ni siquiera los propios militantes del partido quieren a Ministros quemados y desgastados, y por parte del PNV su supuesta responsabilidad no es más que el cinismo del que llevan haciendo gala durante mucho tiempo, el cinismo de decir una cosa en Madrid y otra en Vitoria y de aliarse con el diablo si con ello pueden sacar cuatro perras más, una posición esta en la que CiU no le anda a la zaga, porque si en esta ocasión no van a apoyar los Presupuestos del Estado, no es más que porque las elecciones en Cataluña andan muy cerca y tienen todas las papeletas para ganarlas, así que apoyar al PSOE en esta ocasión sólo les restaría votos-.
 Y qué decir del PP, que critica todas estos tejemanejes pero se niega a modificar la ley electoral que los permite, porque sabe que es una ley que le beneficia a la hora de transformar los votos en escaños. O que a través de sus medios no deja de comparar al PSOE con ETA, pero luego no duda en pactar con ellos una reforma anticonstitucional de la Ley susodicha que permite expulsar a cargos electos si no condenan la violencia (eso, cuando ellos se niegan sistemáticamente a condenar la violencia de la Guerra Civil y la represión franquista) porque saben que así quedarán puestos libres que pueden ser ocupados por miembros de su partido.
 Podríamos seguir así y no acabar nunca, pero lo que queda claro es que en estas circunstancias la obra de Maquiavelo es un manual de buenas prácticas políticas

No hay comentarios: